La Plutocracia— el verdadero modelo ecónomico de los civicos cruceños

En varias entrevistas en diferentes medios de comunicación, algunos representantes cívicos hablan del “modelo económico cruceño” como si fuese un modelo separado e independiente de las políticas nacionales de desarrollo, sin embargo, en las ultimas semanas del paro cívico cruceño, ha evidenciado las implicaciones políticas de la plutocracia cruceña, donde la ley y el orden, se subordinan a los intereses privado y al poder del dinero.

La plutocracia, fue usada por primera vez por el historiador y filósofo griego Jenofonte, donde básicamente se refiere al control de un estado por parte de las élites económicas, que valiéndose del sistema democrático promulga leyes a su beneficio e intereses, en detrimento del resto de la población. Esta composición de la subordinación del poder político a los intereses económicos de un sector privado, también ha sido estudiada por Martos, en su libro: La plutocracia, el control del Estado por el dinero, (2000), donde nos explica que la plutocracia se encuentra detrás de la democracia, donde el político debe rendir cuentas al poder real del dinero que paga los gastos del acceso al Estado así también de la política.

Si bien el autor Martos, utiliza otros escenarios sociales para explicar de como la cantidad de dinero de las grandes corporaciones influye en la decisiones de los políticos, no menos cierto, es que también se ve dicho escenario en el Departamento de Santa Cruz, toda vez que según Martos: “El régimen político propuesto por la globalización, hay una estrecha relación entre los intereses de los mayores inversores y las decisiones políticas adoptadas, ya que sería un desatino suponer que las corporaciones transnacionales ponen sobre la mesa esas gruesas sumas a cambio de nada” (2000) tales circunstancias se evidenció en el cambio de consigna de los cívicos, cuando los empresarios cruceños, se pronunciaron cuando se suspendieron las exportaciones, pero seis días de paro cívico que afecta a la población más humilde no se pronunciaron.

En una plutocracia tradicional, pretende realizarse sin intervencionismo estatal, pero en Bolivia, por tener una retrasada y conservadora elite empresarial el Estado Plurinacional, tiene la obligación de impulsar también a dicho sector de la sociedad, como se puede verificar en las subvenciones en el combustible, de la tarifa eléctrica y de alimentos de fertilizantes de las cuales ayuda para que las empresas cruceñas sean competitivas en el mercado internacional, pero no conformes de esa política nacional, generan una violencia económica.

Esta violencia económica tiene dos niveles:

1. Los empresarios a través de los Cívicos y de la gobernación de Santa Cruz, generan en el interior de un sistema democrático demandas que intentan disfrazase de interés nacional, solo con el objetivo de controlar las tomas de decisiones y para ello ejecutan un paro cívico para los pobres y otro muy diferente para las grandes empresas.

2. En el contexto nacional, la paralización de las actividades se calcula entre 36 y 40 millones de dólares, de acuerdo a los datos presentados por el Ministerio de Economía y Finanzas Públicas.

Gonzalo Flores.