Los comentarios realizados por el billonario Sudafricano Musk referente al apoyo al golpe de estado para obtener el litio boliviano no han pasado desapercibidos en casi todo el mundo, lo triste es que en el lugar que más debería haber repercutido no tuvo la más mínima cobertura (y eso que a los dueños de los medios de comunicación les encanta vender el sueño americano y ese futuro de libre mercado que tanto promulgan y apoyan) en el Estado Plurinacional de Bolivia. Los comentarios inapropiados (sea en burla o sea verdad) solo reflejan la visión miope que desde siempre los países llamados “desarrollados” han tenido de los países “tercermundistas” o en “vías de desarrollo”, nos ven únicamente como proveedores de materia prima para conseguir elevar sus ganancias. El caso de Elon Musk no es ajeno y es el ejemplo perfecto de como la maquinaria mediática puede convertir a personas como él, en entes agradables y empáticos ante las nuevas coyunturas mundiales mediante el afamado discurso de “salvar la humanidad” usando “energías alternativas” en carros de alto lujo (que posiblemente solo Doria Medina podría comprar en Bolivia), el afamado discurso de personajes como Musk es agradable a la clase media que se indignaba de los incendios en la Chiquitania en el 2019 (pero durante este año se callaron cuando la cantidad de focos de calor e incendios fue similar) y que son los mismos que salieron a protestar en contra de la carretera del Tipnis, argumentando la ecología como bandera, este tipo de personajes justifican comentarios y acciones como apoyar un golpe de estado basado en un “Ecofascimo” (muy disimulado), o sea puedo derrocar un gobierno democrático que fue instaurado con más del 60 % de votos para obtener la materia prima necesaria para usarla en carros eléctricos de elevado lujo, que posiblemente la población del país de donde obtiene la materia prima jamás tenga acceso, se justifica un golpe basado en que con esa “acción” reducirá los efectos de gas invernadero (aferrándose a que las movilidades son los mayores productores de dichos gases y nos las grandes empresas con capitales privados dueños del libre mercado) y señalando que derrocar un gobierno que posee la reserva más grande de litio salvará al planeta. Tipos como Musk ven en esta #DictaduraEnBolivia la oportunidad de sacar ganancia a costa de la soberanía nacional de un país. Ellos prefieren usar de bandera la ecología para justificar el #GolpeDeEstadoEnBolivia en lugar de luchar contra todo un sistema capitalista que mediante la explotación del hombre por el hombre ha creado todo el caos que actualmente se vive.
Pocos lo saben, pero la mayor parte de las empresas de Musk viven de subsidios Millonarios dotados por el Tío Sam, dichos subsidios vienen del impuesto del ciudadano norteamericano y adivinen… el Tío Sam pide a su hijo pseudoambientalista-humanista que pague lo que se invirtió en él. (clara muestra de que el imperialismo no es un invento creado por los MASISTAS)
Dicen ser salvadores de la humanidad, pero no luchan contra el sistema capitalista, el más injusto, asesino de seres humanos y del medioambiente, pero son salvadores del planeta y sus seres humanos queriendo llevarse a precio regalado el Litio Boliviano en alianza con la #DictaduraEnBolivia.
Nunca me he considerado alguien “ambientalista” intento día a día tratar de minimizar mi huella de carbono pero jamás a costa de la felicidad y necesidades de mi semejante.
Como diría Pepe Mujica cuando hablamos de luchar por el medioambiente, no tenemos que olvidarnos del primer elemento que lo compone (al medioambiente): la felicidad humana.
Por último, que la gran maquinaria mediática no te venda que Musk es buen tipo y que tampoco te venda que no hubo #GolpeDeEstadoEnBolivia , recuerda a Galeano, “los medios te dirán que llueve cuando te están meando”.